Mi pasión, enseñar Taekwon-Do
Era un sábado cualquiera a eso de las 10 de la mañana cuando comenzaban las actividades en la academia de Taekwon-Do, Jeonsa, ubicada en la Plaza del Lago, en la Cumbres. Esta escuela de artes marciales ya tiene dos años y es dirigida por el Sabonim (maestro-lÃder), Sayler De León, cinturón negro 4to. Dan.Â
En un receso que se tomó, el Sabonim nos cuenta que desde el 2005, cuando alcanzó la cinta negra, se dedica a enseñar, inicialmente como asistente en otra academia, y años después, lo hizo en su propia escuela.
«Siempre tuve la sensación de querer enseñar a los niños. En parte, sentà ese impulso, de familia. Mis padres son educadores, no pude escapar. A pesar de tener estudios en ingenierÃa, no era lo que decantaba para mÃ. Mi lÃnea era enseñanza. Preferà el arte marcial, porque tiene atributos que, dentro de la escuela, los chicos no se pueden desarrollar», destacó.
El Sabonim De León explicó que Taekwon-Do tiene cinco principios:  perseverancia, cortesÃa, autocontrol, integridad y «el llamado espÃritu indomable». Sostiene que dependiendo de cada maestro se pueden ir agregando otros valores y que, en su caso, hace énfasis en la lealtad y el coraje.
Arte marcial de manos y pies
La palabra Taekwondo podrÃa traducirse como «el camino de pies y manos». Es un arte marcial de origen coreano y que alcanzó su reconocimiento como deporte olÃmpico en el año 1988, en las Olimpiadas de Seúl. Maestros coreanos ubican el nacimiento del Taekwon-Do en el año 50 D.C. relacionándolo con la práctica del arte marcial nativo llamado Taekkyon.
Por su parte, De León nos explica que en esta disciplina se utiliza mayormente las piernas, lo que la hace un poco diferente y difÃcil, ya que estamos «programados» para defendernos o golpear con las manos.Â
«Se trata de un movimiento antinatural, el uso de las piernas para defendernos. Con esto mejoramos la coordinación, restructuramos el cerebro. La mayor parte de las artes marciales utiliza principalmente las manos. La patada le da una espectacularidad al Taekwon-Do», subrayó.
Para el maestro, este arte en los infantes de entre 4 a 5 años permite que vayan desarrollando la capacidad motriz, mejoran su estabilidad al correr o caminar, asà como la coordinación al subir o bajar las piernas. Añadió que en los niños de mayor edad se busca reforzar la disciplina al tener que acatar órdenes.
Aconseja a los padres a que no dude en inscribir a sus hijos en un arte marcial. «No pierdan la autoridad dejando la decisión en manos de niños, ellos siempre tomaran en camino fácil. Si está pensando matricularlo, hágalo. Tómese el tiempo para evaluar al maestro, ya que abra unos mejores que otros», dijo.
Poco apoyo, aunque ya se alcanzó el oro.
El pasado 22 de noviembre, la atleta, Carolena Carstens le dio a Panamá su primera medalla en los Juegos Bolivarianos, que desarrollaban en Santa Marta, Colombia. Esto en la categorÃa de los 57 kilogramos.
En sentido, en Panamá hace unos años se constituyó la Federación Panameña de Taekwondo reconocida por el Instituto Nacional de Deportes (PANDEPORTES) y el Comité OlÃmpico de Panamá.
En tanto, el Sabonim destacó que la mayorÃa de eventos que se realizan en el paÃs son financiados con recursos propios y privados, y que, a pesar de contar con una federación, se recibe poco apoyo.Â
Â
