El Instituto Especializado de Análisis (IEA) de la Universidad de Panamá se ha consolidado como el laboratorio de referencia más importante del país, encargado de salvaguardar la salud de la población mediante el análisis y el control de calidad de alimentos, medicamentos, cosméticos y otros productos sanitarios.

Así lo afirmó Goy Navas, director del IEA, al destacar que el laboratorio no solo verifica el cumplimiento de las normativas exigidas por el Ministerio de Salud, sino que también proporciona apoyo técnico y asesoría a otras instituciones públicas, como la Autoridad del Canal de Panamá, certificando tanto la calidad de las aguas servidas y fluviales como la pureza del aire en el entorno canalero.

Navas enfatizó que el IEA se encarga de inspeccionar el primer lote de cada medicamento de fabricación nacional antes de que pueda comercializarse en el territorio panameño. De igual forma, el primer lote de los fármacos importados, que sean producidos en países con altos estándares de calidad, también atraviesa el estricto procedimiento de análisis del laboratorio, así como todos los productos que sean considerados de interés sanitario.

“El Instituto Especializado de Análisis proporciona una garantía indispensable para el resguardo de la salud colectiva”, afirmó Navas, considerando que el laboratorio trabaja bajo rigurosos protocolos y con el más alto standard técnico-científico.

En ese contexto, el rector de la Universidad de Panamá, Eduardo Flores Castro, subrayó que el IEA es un laboratorio de referencia reconocido tanto por el rigor de sus análisis como por el profesionalismo de sus investigadores y técnicos. “Su labor principal consiste en llevar a cabo análisis especializados de alimentos, medicamentos, cosméticos y otros productos que ingresan al país, con el propósito de garantizar tanto la seguridad como el cumplimiento de las normativas sanitarias”, afirmó.

De esta manera, el IEA se posiciona como un actor clave en el fortalecimiento de los mecanismos de vigilancia y control de calidad, salvaguardando así el derecho de los panameños a productos fiables, eficientes y seguros para el mantenimiento de la salud colectiva.