El acto estuvo marcado por momentos especiales y emotivos. Tres miembros de una misma familia compartieron escenario para recibir juntos sus títulos universitarios: Rosa Rojas, quien culminó la licenciatura en Derecho; su hija, Yarlenis G. Matos Rojas, también abogada; y su hijo, Alfredo Jeffrey Matos Rojas, quien obtuvo con honores el título de Técnico en Inglés.

La ceremonia también destacó por la presencia de la primera egresada con discapacidad auditiva, lo que reafirma el compromiso de la Universidad de Panamá con la inclusión.

“Hoy demuestro que cuando usted se organiza y tiene el deseo de cambiar la historia, lo puede lograr. Ha sido difícil, pero la satisfacción es mayor”, expresó Rosa Rojas al recibir su diploma, acompañada de sus hijos. Yarlenis celebró la experiencia como “el mejor regalo de su vida”, mientras que Alfredo Jeffrey calificó como “una bendición” graduarse junto a su madre y hermana.

Durante la ceremonia, Éibar Lezcano, estudiante con el mayor índice académico de la promoción, pronunció un discurso motivador en el que destacó el valor del esfuerzo, la constancia, la fe y el apoyo familiar en la consecución de los sueños. “Este logro es prueba de que los sueños se cumplen con esfuerzo, constancia y fe, y que el futuro comienza en este nuevo capítulo que todos emprendemos”, afirmó.

El director del CRU Darién, Andrés Chang M., presidió el acto y resaltó que la ceremonia simboliza la culminación de un proceso de formación que une disciplina, apoyo familiar y compromiso institucional.

Exhortó a los graduandos a ejercer con ética e integridad, recordándoles que “son los mejores embajadores ante la sociedad” y que Darién requiere su talento y liderazgo.

En representación del rector de la Universidad de Panamá, Dr. Eduardo Flores Castro, el vicerrector de Investigación y Posgrado, Dr. Jaime Javier Gutiérrez, subrayó el papel histórico y cultural de Darién, así como el compromiso de la universidad con la equidad y el acceso a la educación superior en todo el país.

También recordó los retos institucionales derivados de las limitaciones presupuestarias, pero reafirmó que la Universidad de Panamá mantiene su sello de excelencia y su misión de contribuir a una sociedad más justa, incluyente y sostenible.

La emotiva ceremonia no solo celebró la culminación académica de decenas de jóvenes darienitas, sino que también evidenció el impacto transformador de la Universidad de Panamá en la región, al ofrecer oportunidades de educación superior que fortalecen el desarrollo local sin necesidad de emigrar a la capital